Me fui de senda

¡El domingo estuve de senda y vi osos!, ¿como os quedáis?. Al principio no lo pasé bien, no se si os dije que me pongo nerviosa en el coche, no me gusta ir en la sillita amarrada, así que grité muchisimo, lloré y le pegué patadas a mami en el respaldo. Fui llorando hasta que llegamos a lo de los osos. Papá y mamá iban un poco tristes ya. Luego vimos los osinos ¡que grandisimos son! y eso que estaban lejos, les dije que vinieran a verme, pero no lo hicieron, ¡yo los quería tocar!. Estuvimos allí un rato y luego nos pusimos a caminar, ahi fue cuando vi otros niños, bicis, mariposas y muchos "nimalitos" y dejé de llorar. Caminé muchísimo, dice mama que más de un kilómetro, el resto lo hice en sillita y comí galletas. También estuve sentada al lado de un río y metí los piesinos un poco, ¡que fría estaba el agua!, lo pasamos muy bien tirando piedras al agua. Comimos un bocadillo e hice la siesta en el carrito. Lo pasé tan bien como el día que me llevaron a Ikea y comí mi propio plato de pasta con tomate. ¡Tengo que pedir que me lleven de senda otra vez!.