Hoy estoy reflexiva. Este finde he hecho tantísimas cosas y me lo he pasado tan bien, que tengo mucho en que pensar. Por ejemplo, el sábado fui a la piscina y al parque a jugar y por la tarde ¡ me compraron una pelota para mi sola!, ¡que maravilla!. Ayer, que parecía imposible pasarlo mejor, ¡fue mejor!, por la mañana fui al parque y de tarde a casa de un amigo de los abuelos. No iba yo muy convencida, quería volver a los columpios y no entendí cuando mama dijo: "Vamos a ver a Herminio", pero resulto genial. ¡Herminio tiene muchos amigos!.
Estaban los abuelos, mariajo y mucha gente agradable, hice dos amigas, había jardín, le toqué la cara a un perro, comí un cupcake rosa y jugué con mi pelota nueva. ¿A que pensáis que no puede ser mejor?, pues todavía hubo más, ¡me llevaron a un sitio grande, "fiesta de prao" se llamaba y me subí en un cocó. Ya sabéis que yo llamo cocó a todo lo que sean columpios y parque. Era de saltar y tenía música, ¡que risa pasé!, eso si, cuando me bajaron lloré un poco. Es normal, ¡era tan fantástico aquel cocó!...
Hoy fui a la guarde, lo pasé muy bien, pinté mucho y barrí un poco el suelo. Todo iba normal hasta que mamá dijo que era mi santo, y ¿que creéis que pasó?, ¡que merendé chocolate con churros!, espero que mi santo vuelva a ser muy pronto, ¿vosotros no?.
No hay comentarios:
Publicar un comentario