A unas pocas horas de conocer quién será el próximo presidente de los USA, me surgen varias reflexiones. Por un lado me hace mucha gracia escuchar las opiniones de los tertulianos de la radio, quienes, salvo excepción no han vivido allí nunca, y dicen cosas como “Obama es mejor presidente” o “ha hecho una buena gestión”. En fin… la mejor de las definiciones de Obama la dio Madonna (la cantante) hace poco y no la voy a repetir para que nadie la saque de contexto, pero digamos que el color y el segundo nombre de Barack tienen mucha más importancia de lo que parecen.
En cuanto a su gestión es opinable. A un presidente que en un país con el número de habitantes de aquel, con los números de inmigración ilegal, con la cifra de desempleo y en plena recesión económica promete seguridad social gratuita, se le puede calificar de visionario siendo amable o de aturdido. Los números no apoyan su gestión. El paro no ha empezado a recuperarse hasta el último trimestre, la industria no se ha recuperado del todo aun y algunos opinan que el país puede entrar en recesión económica. Barack movilizo hace cuatro años a un nuevo tipo de votantes que acudió en masa a las urnas, las mujeres y los inmigrantes hispanos sobre todo. Las razones que esgrimían las encuestas eran, para las primeras, que era guapo y buen marido y para los segundos que no iban a tener que pagar la sanidad. Su reforma sanitaria no se ha conseguido llevar a cabo y a pesar de lo que digan, numéricamente es inviable y la deportación ha subido considerablemente en su mandato. Digamos que su gestión ha sido poco efectiva y poco pragmática pero vistosa. Por el contrario al denostado, por desconocido imagino, oponente de Obama, pese a decir alguna que otra sandez sobre España, si se le puede atribuir un merito enorme. Entro en posesión, como gobernador, de un estado rozando la bancarrota y cuatro años después lo dejo con superávit. ¿Qué no sabe dónde situarnos en el mapa?, mejor que se ocupe de hacer grande a América que eso nos viene bien a todos. ¿Qué no se va a poner a favor nuestro en contra de Ángela?, es que no es su trabajo. Tampoco es el de Barack, como no era el de Zapatero ocuparse de las naciones desfavorecidas… tanto se ocupo que nos convirtió en una.
Y digo yo, si usted fuera una persona de ventipocos, tuviera un título universitario, muchos prestamos de estudios por devolver, muchas horas de trabajo por delante y la esperanza de llegar a ser alguien ¿a quien votaría usted?, al presidente actual que promete regalar su dinero a los desfavorecidos del mundo y que en cuatro años no ha mejorado las cosas o al candidato… La respuesta en unas horas, por ahora las encuestas dan empate…
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