El martes hice un examen. Saque un siete sin estudiarlo porque ya me lo sabía. La cosa es que me dice mamá, que aunque me lo sepa, tengo que estudiar. Al parecer tiene que ver con el habito de estudio. Va a llegar un día en que no me sirva solo con escuchar en clase, y que mi cerebro se negará a disciplinarse. Al parecer es lo que le pasa a ella cada vez que trata de estudiar Psicobiología. Yo creo que no le pasa nada a su cerebro, que con ese nombre, no puede ser bueno estudiarlo y punto.
Llega el puente de carnaval y estoy feliz. Cinco días sin colegio. No necesito añadir más.
Ya tengo vez en el fotógrafo para mis fotos de comunión. Mamá esta pensando en el peinado. Una amiga va a ir a la peluquería, pero mama dice que me va a peinar ella. Vamos a ensayar el tema un tiempo antes. Tengo una corona de flores preciosa para ponerme, no como la pobre mamá que llevaba una capota horrible. Así salió en las fotos toda enfurruñada.
Esta semana es corta, y estoy apuntada a un curso que me gusta mucho. Voy a ir disfrazada. Como tengo varios disfraces tengo que escoger uno. El ultimo que me han regalado es de estudiante de Gryfindor, mola mucho.
Una amiga mía se ha echado novio. No lo veo normal con ocho años, pero la locura romántica campa por mi colegio. Yo paso del tema. Los niños de mi cole son feos y bobos en su mayoría. A mi me gusta Henry Danger, cuando encuentre uno parecido, y sea más mayor, me lo pensaré.
Voy a dejaros porque tengo deberes de lengua y luego quiero jugar un rato.